La Comisión para la Cooperación Ambiental (CCA) se enorgullece de anunciar el lanzamiento de su nueva biblioteca en línea sobre edificación sustentable: acervo conformado por cerca de 400 publicaciones, bases de datos, artículos y otros recursos en la materia. Visite <www.cec.org/biblio_es> para tener acceso a noticias y análisis relacionados con la construcción de edificaciones sustentables en América del Norte y allende: desde iniciativas de política y modelos de financiamiento en pro de la edificación respetuosa del medio ambiente hasta materiales de capacitación y estrategias de diseño integral. 
Deseamos agradecer de manera especial a la presidenta del Equipo de Tarea Trilateral de la CCA para Fomentar la Construcción de Edificaciones Sustentables, Ann Edminster, así como a Olivia Collins y Rosemarie Le Faive, por la extraordinaria labor que desempeñaron en la integración de un acervo de tanta utilidad.
Este centro de información y recursos en línea es una de las muchas iniciativas que la CCA y su equipo de tarea, conformado por especialistas en edificación sustentable de Canadá, Estados Unidos y México, han llevado a cabo en aras del mejoramiento de las condiciones para la construcción de edificaciones ecológicas en América del Norte. Con miras al futuro, como parte de esta ininterrumpida labor y dentro de las actividades de la Comisión para 2013-2014, el Consejo de la CCA —integrado por los funcionarios con rango de secretaría de Estado de Medio Ambiente (o su equivalente) de los tres países— ordenó adoptar un enfoque renovado y apuntalar la capacitación de la fuerza laboral y la adopción de mejores prácticas en el sector de la construcción; impulsar el desarrollo de la capacidad en México para instrumentar el programa ENERGY STAR, y respaldar el acceso de comunidades aisladas en toda la región a la construcción de edificaciones sustentables.
Fuente: http://www.cec.org/Page.asp?PageID=122&ContentID=25671&SiteNodeID=211&BL_ExpandID=

Publicado en Proyectos Nacionales

La Comisión para la Cooperación Ambiental (CCA) ha considerado siempre pertinente prestar atención al uso del lindano, sustancia química que viaja por las corrientes de aire desde las regiones templadas y tropicales de América del Norte —donde tiene un uso sobre todo agrícola— hasta llegar a ambientes más fríos y septentrionales, como el Ártico. Su neurotoxicidad ha quedado demostrada en las últimas décadas: en el ser humano, el lindano afecta adversamente no sólo el sistema nervioso, sino también el hígado y los riñones.


En un informe publicado recientemente se analizan los logros de varios años de cooperación, por medio de la CCA, entre científicos y funcionarios de gobierno de Canadá, Estados Unidos y México en aras de reducir el riesgo de la exposición al lindano en la región.


En 1999, cuando al amparo del programa Manejo Adecuado de las Sustancias Químicas (MASQ) de la CCA empezó a prepararse el Plan de Acción Regional de América del Norte (PARAN) sobre Lindano, esta sustancia química seguía empleándose en los tres países en distintos productos farmacéuticos para tratar la pediculosis y la sarna, al igual que en plaguicidas y en la agricultura para el tratamiento de semillas.


Plan de Acción Regional de América del Norte sobre Lindano
En la preparación del borrador del plan de acción, la CCA se aseguró de que cualquier persona afectada por el lindano o que supiera algo al respecto pudiera participar en el proceso. Se llevaron a cabo reuniones y consultas con comunidades indígenas, grupos dedicados a la salud infantil, organizaciones ambientalistas, representantes de la industria, y expertos en toxicología, transporte atmosférico, epidemiología y vida silvestre. Los tres países trabajaron conjuntamente a fin de preparar e intercambiar información relacionada con alternativas al lindano más seguras, además de que ordenaron el etiquetado de los productos que aún siguieran usándose y contuvieran la sustancia.

Con la mira puesta en combatir el uso del lindano, este plan formó parte de una iniciativa trinacional de mayor alcance y sin precedentes entre los gobiernos de América del Norte, cuyo objetivo era el de monitorear y reducir los riesgos a la salud ocasionados por sustancias químicas como el mercurio, el DDT, el clordano y los bifenilos policlorados (BPC). Si desea información más detallada acerca de estos planes de acción, visite: www.cec.org/contaminantes.


Impacto del PARAN sobre lindano
El plan de acción respaldó a México en su nominación del lindano como sustancia candidata a eliminarse, en apego al anexo A del Convenio de Estocolmo, tratado internacional sobre medio ambiente que busca eliminar el uso de contaminantes orgánicos persistentes (COP). En 2009 se aceptó la nominación de México, y hoy día la producción y utilización de lindano están ya prohibidas en los más de 150 países que han ratificado el Convenio.

Gracias a la instrumentación del PARAN sobre lindano, cada uno de los tres países ha alcanzado avances significativos en la reducción de los riesgos de la exposición dañina a la sustancia.


En Canadá, desde el 1 de enero de 2005, la Agencia de Regulación del Uso de Plaguicidas (Pest Management Regulatory Agency, PMRA) empezó a eliminar los registros de productos agrícolas con contenido de lindano. Actualmente aún se permite la utilización de la sustancia en tratamientos secundarios contra la pediculosis y la sarna, pero este último uso concluirá en 2016.


En Estados Unidos, en 2001 y 2002, los solicitantes de registro cancelaron voluntariamente todos los usos del lindano para el tratamiento de semillas, salvo en seis aplicaciones. Pocos años después, en julio de 2006, las autoridades estadounidenses recibieron peticiones para la cancelación voluntaria de todas las solicitudes de registro de lindano y el 1 de octubre de 2009 fue el último día en que este producto pudo emplearse para el tratamiento de semillas. Aunque la sustancia sigue utilizándose como tratamiento de segunda línea contra la pediculosis y la sarna, en 2003 la Administración de Alimentos y Fármacos (Food and Drug Administration, FDA) multiplicó los avisos de peligro en los envases y redujo el tamaño máximo del empaque a efecto de prevenir su uso excesivo.


En México, en 2009 se tenían en vigor 18 autorizaciones de uso de lindano; en la actualidad restan sólo tres registros, todos en proceso de revocación por parte de la Secretaría de Salud.


Los integrantes del Equipo de Tarea de América del Norte sobre Lindano destacan en las conclusiones del informe publicado que aún es preciso trabajar un poco más en México con el propósito de evaluar los efectos en la salud causados por sitios contaminados, así como respaldar el uso de alternativas al lindano.

Fuente: http://www.cec.org/Page.asp?PageID=122&ContentID=25718